Hola simios,
Hoy les voy a contar acerca de un experimento de redes sociales que se llevo a cabo en Estados unidos y a partir de ahí intentaré analizar algunas cuestiones...
Hoy les voy a contar acerca de un experimento de redes sociales que se llevo a cabo en Estados unidos y a partir de ahí intentaré analizar algunas cuestiones...
Coby Persin se hizo pasar por un chico de 14 años creándose un perfil de
mentira. Para ello, abrió un Facebook con un nombre trucho y en su foto de
perfil puso una imagen de un chico que bajó de internet. Se contactó con 3
chicas: una de 14, otra de 13 y una de 12 años. Con las 3 mantuvo una
conversación durante 4 días vía chat y un cierto coqueteo que dieron ganas de
un encuentro. Todas acudieron a las citas a escondidas de los padres.
La peculiaridad de estos eventos es que a las 3 salidas fueron invitados, por
parte de Coby y sin que las chicas sepan, los papas de las mismas. La idea de
este “experimento” fue en primer lugar, que los padres sean conscientes hasta
dónde pueden llegar sus hijas teniendo acceso a internet y por último, generar
conciencia a las niñas de que lo que hacían era más que peligroso ya que se
estaban por encontrar con un desconocido.
Hoy en día tener acceso a internet nos trae las mayores ventajas que podemos
imaginar: desde pedir comida hasta comprarnos un par de zapatillas; organizar
un viaje y comprar los pasajes o buscar el significado de una palabra en tan
solo 3 segundos.
Pero si internet no es bien usado, puede jugarnos en contra y traernos
consecuencias no gratas. Ahora… ¿Qué significa utilizar “bien” internet? Eso es
personal y va a depender de cada uno. Lo que sí debemos tener en cuenta son los
peligros que corremos y que en algún futuro pueden correr nuestros hijos si no
estamos bien informados a la hora de utilizarla.
Se dice que conocemos la existencia de tan solo una mínima parte de
internet. Existe una porción desconocida
por nosotros denominada “Deep web”: internet profunda o invisible. Lo que la
hace inaccesible es la incapacidad de los motores de búsqueda como Google o
Yahoo de encontrar la información que hay en ella ya que hay códigos
establecidos que lo imposibilitan. La Agencia Nacional contra el Crimen del
Reino Unido llamó a esta gran fracción de internet “refugio de la delincuencia”
por el contenido ilícito que hay en ella mientras que quienes han podido entrar
lo denominan “mundo perturbador”: mercado negro, hackers, tráfico ilegal de órganos,
terroristas, pornografía infantil, asesinos, videos impactantes, narcotráfico,
etcétera.
Internet es como el universo y el universo es infinito. Solo conocemos la punta
del iceberg. Es inimaginable la cantidad de cosas podemos llegar a conocer navegándola
y las que aún no conocemos. Hoy en día
el acceso a ella la tiene cualquier persona. La idea de este post no es asustar
sino alertar, informarse y estar atentos. Porque más allá de la “atomización”,
el “distanciamiento afectivo” y lo anti social que puede llegar a convertirse
un ser humano por el uso excesivo de internet, creo que hay algo más allá que
por inconciencia, inocencia y desinformación nos hace vulnerables ante ella.
Nos da confianza y en muchos casos hace que “regalemos” información que jamás
vamos a saber para qué va a ser utilizada. Los menores de edad y los jóvenes
son los mayores usuarios de internet.
Detrás de nuestras computadoras estamos nosotros, pero ¿quiénes son las
tres mil millones de personas restantes? En cierto modo, estamos expuestos, nos
hace creer que podemos manejarla y es al revés, ella nos maneja a nosotros.
Julieta,
simio mayor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario