Hola pequeños Simios,

Ayer estaba viendo el noticiero y entre los títulos se encontraba lo que está sucediendo en Tucumán, donde los ciudadanos se levantaron en señal de protesta por disconformidad en los resultados de las elecciones. Esta realidad me hizo acordar a lo que alguna vez estudié en el colegio cuando en 1969 en Córdoba estalló un movimiento similar. En aquel entonces este hecho fue conocido como el Cordobazo, hoy en día aparece en los medios como #Tucumanazo. ¿Pueden ver la diferencia?

Antes este pequeño símbolo aparecía en los teclados de los teléfonos para activar funciones especiales o códigos abreviados; hoy aparece en diarios, revistas, en la televisión, en la radio y hasta en las conversaciones de las personas.

El hashtag, como mayormente se conoce a este signo, se compone de dos palabras en inglés: hash (numeral) y tag (etiqueta), tiene su origen en las plataformas de microblogging, como por ejemplo Twitter y se utiliza para englobar una temática bajo un nombre, o un título.

Sin embargo en una sociedad posmoderna donde las modas y las tendencias parecen expandirse minuto a minuto el hasgtag no se quedó atrás y se convirtió en unos de los recursos más utilizados a la hora de la difusión de un mensaje incluso fuera de la web.

Los medios de comunicación son uno de los principales agentes de cambio en el paradigma de la transmisión de información, son los primeros en transformarse ante una nueva sociedad y modificarse en función de las necesidades de sus receptores. ¿Supervivencia del más apto? ¿El que no se adapta desaparece? Puede ser.

Hoy en día, la sociedad está fuertemente condicionada por estos cambios de realidades y en una comunidad donde la interacción a través de tecnologías se hace más presente que la proximidad física, es fundamental estar constantemente actualizado para poder interpretar los nuevos mensajes, los nuevos canales, los nuevos recursos.

A pesar de esta distancia física que se ve entre los individuos, el hombre sigue su instinto de pertenencia a la manada y se hace de estos nuevos elementos para tener la posibilidad de estar conectado con todo, de estar vertido en todos los planos. Es por eso que a la hora de brindar una opinión del tema, el hombre va a optar por identificarse con el resto y englobar sus conclusiones, sus pensamientos, sus testimonios bajo el hashtag que sus pares están utilizando. Por eso los medios de comunicación van a poner sus títulos bajo la influencia del hashtag y la viralización de sus temáticas será más exitosa.

En un pasado, el hecho de transformar nuestro código icónico deformando las palabras, tomando términos en otros idiomas, escribiendo sin espacios y sin respetar las mayúsculas era impensado, pero no me sorprendería que un futuro el capítulo de un libro de la historia argentina se llame “#YoSoyTucumanazo” 

Camila, 
Simio Menor.